Publicado el 26-03-2024 en UCC

Eficiencia energética

Consejos para disminuir el consumo, a propósito del encarecimiento del costo del servicio eléctrico por la quita de subsidios.

En un contexto donde la factura de energía eléctrica se eleva exponencialmente buscamos consejos en materia energética que nos ayudarán a ahorrar. Hablamos con Macarena Rodríguez Campos, docente de nuestra Facultad de Ingeniería.

Hay dos conceptos que es importante rescatar; uno es el uso racional de la energía que responde a su utilización de una manera lógica y sensata y además, sin desperdicios, desde un punto de vista energético. El otro es la eficeincia, que responde a la utilización de la menor cantidad de energía necesaria para obtener el fin perseguido, desde un punto de vista económico.

El uso racional de la energía son las actitudes que las personas podemos tener para ahorrar en nuestro hogar o lugar de trabajo, por ejemplo, apagar la luz cuando no la utilizamos o bien poner el aire acondicionado a 25°C. La eficiencia energética tiene que ver con el gasto energético del equipo que utilizamos. Por ejemplo, una luz LED es más eficiente que una luz de bajo consumo con tubo fluorescente. ¿Qué cuestiones se pueden aplicar en la cotidianeidad para reducir el consumo?

Todos los días las personas podemos tomar decisiones que busquen mejorar el consumo de energía de nuestros hogares desde los electrodomésticos que tenemos hasta el uso que le damos. Es decir, puedo comprar el aire acondicionado más eficiente del mercado pero si lo dejo prendido mucho tiempo en un espacio que no utilizo, entonces pierde el sentido porque no estoy utilizando de manera racional esa energía. Apagar los equipos electrónicos cuando no se utilizan o incluso desenchufar algunos de ellos son medidas para mejorar el consumo eléctrico. La eficiencia energética tiene que ver directamente con los equipos que tengo en mi hogar, negocio o empresa. Para conocer que electrodomésticos conviene comprar existe un sistema de etiquetado que clasifica los electrodomésticos según su eficiencia energética, desde A+++ que es lo más eficiente hasta la G, aunque cada día quedan menos equipos con colores rojo y naranja en el mercado. Es decir, siempre conviene comprar electrodomésticos con etiquetado energético y con valores en la gama de los verdes.

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La etiqueta de Eficiencia Energética es una herramienta que te permite conocer de manera rápida y fácil el consumo de energía de los artefactos, electrodomésticos o gasodomésticos. Se encuentra siempre en forma de adhesivo. Tiene una barra de colores en escalera con letras en orden alfabético donde cada escalón representa un nivel de eficiencia energética. A mayor nivel de eficiencia, menos consumo de energía manteniendo la misma presentación.

  • Mayor eficiencia: color verde+ letra “A”
  • Menor eficiencia: color rojo + letra “G”

**Otra parte importante de que funcionen bien los electrodomésticos es el mantenimiento que hay que hacerles, por ejemplo, separar la heladera unos centímetros de la pared o limpiar los filtros del aire acondicionado. Cuando un equipo no funciona en las mejores condiciones no trabaja con eficiencia. **

También en Argentina se está avanzando con el etiquetado de viviendas según su nivel de eficiencia energética. Esta etiqueta podría servir para cuando una persona decide alquilar o comprar una vivienda. La vivienda que mejor aprovecha el uso de la energía no solo en los equipos que tiene, sino también en la aislación que posee para mejorar el rendimiento de los equipos tendrá valores más altos de etiquetado energético.

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Consejos

Mantener los electrodomésticos limpios y en buen estado.

Limpiar los filtros de los equipos de aire acondicionado.

Alejar la heladera de puntos de calor.

Alejar la heladera unos centímetros de la pared para que refrigere mejor.

No dejar luces prendidas donde no se utilizan.

Utilizar focos de tecnología LED en lo posible o bien de bajo consumo.

Comprar electrodomésticos con etiqueta A, A+ o A++ y, en lo posible, con tecnología inverter.

Desenchufar aparatos que no se usan como la televisión que consumen también cuando están apagados.

Utilizar el aire acondicionado a 25 grados.

Apagar el módem de internet cuando no se utiliza por varias horas.